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SER LATINO-SER AMERICANO

A propósito de la celebración del descubrimiento de América, el pasado doce de octubre, experimentamos sentimientos encontrados. Luego de varios siglos, las nuevas generaciones nos cuestionamos acerca del efecto de éste acontecimiento histórico. América significó nuevas tierras para la humanidad, tierras productivas y con innumerables recursos. En el “Viejo Continente” se conocieron productos como el maíz, la papa, el cacao (chocolate), el tabaco por este importante acontecimiento. De inmediato se generó un poblamiento diverso, en la cual confluyen diferentes razas, formando pueblos y construyendo culturas, algunos de arraigo indígena.

En este proceso histórico debemos lamentar muchas situaciones que padecieron las poblaciones de América, hasta que, los pueblos de América decidieron independizarse. Aunque se diría que su independencia fue parcial, se formaron naciones que procuraron forjar su identidad y progreso. En el caso colombiano la población se encontraba dispersa en un enorme territorio donde la integración y comunicación de la población estaba interrumpida por accidentes geográficos como grandes cordilleras y ríos.

Fuera de lo complejo que fue la configuración social y política de las naciones americanas, pensemos en los resultados finales del largo proceso histórico. ¡Por Dios!, solicito que no nos quejemos tanto, que miremos lo positivo de todo esto, de esos resultados finales. La enormidad, belleza y diversidad de los territorios del “Nuevo Mundo”. Su riqueza cultural y étnica que se manifiesta en numerosos e intensos géneros musicales. Su gastronomía influenciada por costumbres indígenas, como los alimentos elaborados con maíz. ¿Qué tal los tacos mexicanos?, o una carne asada ala llanera al estilo de los llanos colombo-venezolanos o al estilo de las pampas (llanuras) argentinas. Dicen los que han conocido la comida peruana, que es la mejor.

Disfrutemos el ser latinos, como cuando nos sentamos en una taberna y podemos deleitarnos con diferentes géneros musicales: el tango, la ranchera, la cumbia, el porro, el vallenato, la samba, el regaaetón. Luego la integración cultural con los Estados Unidos, ¿Por qué no?. Con la música del de éste impresionante país y sus estilos gastronómicos, dígase comida chatarra, que consumida con moderación son una satisfacción al paladar y el estómago.

Las naciones latinas poseemos un mismo idioma: El Español. También el portugués en Brasil. Pero el portugués es muy similar al español y lo podemos aprender con facilidad. Gracias a tener un mismo idioma podemos viajar con más tranquilidad a otras naciones latinoamericanas. Es perturbador cuando uno llega a un país que hable otro idioma. El idioma por así decirlo nos conecta con la mayor parte del continente y sus culturas.

Además las formas de espiritualidad. En América predomina el cristianismo, bien sea católico o de otras denominaciones. En cualquier país de América podemos acudir a la religiosidad que hemos elegido o ser indiferentes a este aspecto. En los países americanos hay libertad de cultos.

América es un continente joven, sus naciones tienen cuantiosas posibilidades. Somos naciones de menos de 200 años. Desde el punto de vista histórico es corto tiempo. Hay problemas, ¿Quién lo puede negar?, son un reto ineludible a resolver en el tiempo. Hagamos el ejercicio de hacer un contraste con naciones europeas. Alemania e Italia por ejemplo; después de un larguísimo recorrido histórico cada nación cuenta con un territorio de: 358.000 y 302.000 kilómetros cuadrados respectivamente. Nuestro país cuenta con 1’142.000 Km.. Ósea, que cada uno de estos países no posee ni la tercera parte de nuestro territorio. Además son naciones que ya tienen demasiada población Alemania tiene una población aproximada de 83 millones e Italia de 62 millones, mientras que en éste país hay aproximadamente 47 millones de colombianos y colombianas.

Conclusión: disfrutemos eso de ser latinoamericanos. Disfrutemos de sus paisajes, sus enormes y diversos territorios, de la riqueza del idioma español, sus culturas. Para terminar quiero compartir dos composiciones, una composición personal, una poesía de mi autoría sobre América denominada: “QUE TE DEBO AMÉRICA”, y otra composición tradicional; la letra de la canción “AMÉRICA” de Nino Bravo.

¿QUÉ TE DEBO AMÉRICA?

Yo de América recibí el sol

El sol resplandeciente, el ardoroso sol tropical.

Yo de América recibí los Andes

Esas montañas en las que han transcurrido mis pasos y mis ojos.

Yo de América recibí el Maíz

El maíz que se desgrana y se muele para al comenzar el día nutrir mi ser.

Yo de América recibí los rostros de mis gentes

La Tez del indio, el blanco, el negro, el mestizo, el mulato, el zambo

Yo de América recibí la incertidumbre

Incertidumbre de suburbios en los que habitan gentes marginadas y su clamor por la esperanza.

Yo de América recibí la Fé

La Fé en la cruz, la Fé en el Dios creador

Yo de América recibí la exuberancia de sus tierras

Los verdes de sus campos, el oleaje de sus mares, el cielo fano azul o congestionado.

Yo de América recibí un sueño

Un sueño hacia el norte, en una nación opulenta que promete (que prometía) en su suelo la paz.

Yo de América recibí las amenazas

Las amenazas del imperialismo y las ideas, las ideas nuevas, y las ideas de afuera para estrenar.

Yo de América recibí en mi rostro su lluvia

Su lluvia pura, que luego forma el agua abundante, llena de vida, turbulenta o sosegada.

Yo de América recibí a Colombia y Antioquia

Mi tierra para vivir y luchar.

¿Que te debo a ti, América de los ensueños, América del Dios creador, América fusión de razas y pueblos?

Heme Aquí América que en tus entrañas estoy. (Rodolfo Arango)

AMÉRICA, AMÉRICA

Donde brilla el tibio sol

Con un nuevo fulgor dorando las arenas

Donde el aire es limpio aún

Bajo la suave luz de las estrellas

Donde el fuego se hace amor

El río es hablador y el monte es selva

Hoy encontré un lugar para los dos

En esta nueva tierra

América

(América, América)

Es América

(América, América)

Todo un inmenso jardín

Eso es América

Cuando Dios hizo el Edén

Pensó en América

Cada nuevo atardecer

El cielo empieza a arder y escucha el viento

Que me trae con su canción

Una queja de amor como un lamento

El perfume de una flor

El ritmo de un tambor en las praderas

Danzas de guerra y paz

De un pueblo que aún no ha roto sus cadenas

América

(América, América)

Es América

(América, América)

Todo un inmenso jardín

Eso es América

Cuando Dios hizo el Edén

Pensó en América

América

(América, América)

Es América

(América, América)

Todo un inmenso jardín

Eso es América

Cuando Dios hizo el Edén

Pensó en América

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